Este estudio de caso presenta a la familia de la granja de caballos Brúnir: Einar, Hugrún y sus hijas gemelas Guðbjörg y Þórhildur. Einar y Hugrún tienen una larga experiencia en la cría de caballos, son amantes del arte y disfrutan recibiendo a los invitados y son conocidos desde hace tiempo por sus amigos y familiares por su hospitalidad. Al transformar su granja en una granja familiar abierta en 2017, ofreciendo a los visitantes y huéspedes la oportunidad de conocer el singular caballo islandés, han impulsado sus propias ideas y soluciones innovadoras. El sueño de la infancia de Einar siempre fue convertirse en agricultor, pero tiene una formación educativa diversa, que ha ayudado a dar forma a sus intereses y a ampliar sus conocimientos. Es licenciado en agricultura y herrería, pero más tarde, su vocación por las artes y las obras de arte le llevó a estudiar una carrera de arte. 
Además de organizar exposiciones profesionales en las que se presenta al caballo islandés en su entorno natural, también tienen un estudio y una zona de exposiciones en la que los visitantes pueden ver los cuadros de Einar que se exponen y venden. Combinar su profesión y sus aficiones ha supuesto una oportunidad única para innovar. Además, tienen previsto ofrecer obras de otros artistas para exponerlas de vez en cuando. La formación profesional de Hugrún es la de enfermera de cuidados intensivos, ocupación que ejerció durante muchos años. Ahora ocupa un puesto como facilitadora educativa del Hospital de Akureyri. Se puede decir que en Brúnir nunca hay un momento aburrido. 
Además de su granja de caballos y su galería de arte, disponen de un estudio y una sala de conferencias para alquilar, lo que ofrece a grupos y familias la posibilidad de reunirse y/o conocer la vida en la granja. Su pequeña y acogedora cafetería Brúnir Horse Café ofrece cocina local in situ, el menú consiste en comidas más ligeras, así como pan, pasteles y bollería caseros. La comida se elabora principalmente con ingredientes frescos de la región. 
Este ejemplo de empresa familiar es un buen caso de estudio para introducir la innovación y el espíritu empresarial de los adultos.